Alonso - Ferrari ¿un binomio para una década?
Cuando comenzó la presente temporada de F1, pocos pensábamos que Ferrari o Fernando Alonso podrían ser campeones del mundo. Realmente los ferraristas esperábamos que Fernando estuviese luchando por conseguir ganar alguna carrera al final de temporada. Los Alonsistas también pensábamos lo mismo, Fernando tardaría algún tiempo en conseguir adaptarse al Ferrari y presentar batalla para ganar alguna carrera al final de temporada.
Para los Ferraristas-Alonsistas, se nos presentaba una temporada llena de dificultades, lo normal cuando una escudería cambia de piloto, porque por muchas expectativas, el nuevo piloto tiene que adaptarse a un nuevo coche, lo mismo que el equipo también tiene que adaptarse a las cualidades de cada piloto. Sin embargo nos llevamos una gran sorpresa en las primeras carreras de la temporada, con un Alonso pletórico y con un Ferrari que parecía el "no va más". Después volvieron los resultados esperados, siempre en el pelotón de cabeza pero con pocas posibilidades de plantar batalla a los "gallitos" de la temporada los Red Bull. Sin embargo, conforme avanzaba la temporada, veíamos a un Alonso cada vez más confiado en sus posibilidades de cara al final de la temporada, veíamos a una Ferrari cada vez más centrada en su trabajo y evolución del monoplaza.
Posiblemente el gran premio de Alemanía marcó un momento de inflexión para este equipo, para su mejor piloto y para el mundial. Ferrari plantaba cara a los Red Bull y al resto de los equipos, sacando lo mejor de un equipo que vive y solo tiene sentido en la competición. Alonso también comenzaba a destapar el tarro de las esencias exprimiendo al Ferrari para sacar el máximo provecho del mismo.
Todo ello, junto con la complicidad de todos los mecánicos e ingenieros de Ferrari (con renovada ilusión en el campeonato después de que su piloto y director dijeran por activa y por pasiva que se podía ser campeón del mundo al final de la temporada) han plantado al equipo y por supuesto a Fernando Alonso en el liderato del mundial de F1 2010 a falta de dos carreras para su finalización. Han conseguido pasar de depender de lo que hagan otros participantes a depender exclusivamanete de sus propias posibilidades y de las prestaciones de su monoplaza y de su primer piloto.
Quedan dos carreras para que muchos seamos capaces de disfrutar nuevamente con un el tercer entorchado mundial de Fernando Alonso, esta vez a los mandos de un Ferrari, una de las escuderias, si no la más, con más carisma a nivel mundial.
Esperemos a Brasil y ver los resultados, pero la verdad es que la temporada ha sido fantástica, solo cabe esperar que su final sea apoteósico.
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