INTERNET Y LA SEGURIDADdifícil binomino
El otro día, mientras hablaba con un amigo, me asaltó una duda, de verdad conocen los usuarios de ordenadores y de Internet el peligro inherente a la utilización de Internet, el correo electrónico, la mensajería instantánea, las descargas en las redes p2p....
Pues la verdad, tras los continuos diálogos mantenidos con conocidos, alumnos, amigos, profesionales del ramo, etc., no me queda más que llegar a la conclusión de que NO, la mayoría no conocen los riesgos potenciales de realizar prácticas peligrosas con un ordenador y una conexión a Internet, y buscan una solución mágica que le soluciones las posibles vulnerabilidades de sus sistemas informáticos al 100 % sin abandonar sus prácticas de riesgo.... JE, JE, JE...
Nada más lejos de la realidad actual. Quien quiera encontrarse "relativamente" a salvo de posibles infecciones solo puede recurrir a protegerse mediante un buen antivirus y los complementos necesarios de una suite de seguridad. Y aún así, encomendarse al santo de su devoción para que el malware que infectará (seguro que lo infectará) su ordenador no sea de los más perniciosos, porque si no es así, posiblemente llorará de impotencia ante la pérdida de datos o el deterioro de partes importantes de sus sistema informático.

La verdad es que contra la estupidez humana hay poco que se pueda hacer..., nos molesta mucho (a unos más que a otros) gastarnos entre 40 y 90 euros al año (anuales) en hacernos con un buen sistema de seguridad que nos "proteja" de los peligros de la Red de Redes, pero no nos molesta gastarnos ese mismo dinero en cuatro cervezas y cuatro revistas en un día... Solo cuando hemos pasado por el pago a un profesional para que "limpie" convenientemente nuestro ordenador cuando no por la pérdida irremisible de los datos contenidos en el mismo, nos empezamos a plantear la posibilidad de adquirir un buen sistema de protección...
Pero para ese momento, ya hemos pagado con creces el coste inicial... Además, seguimos con las mismas prácticas de riesgo, lo que posibilita más aún nuestra posible "infección"... Pero este desconocimiento no nos libera de los problemas que pueden acarrear, además de la pérdida de tiempo, información y dinero, la más importante de todas, nuestro orgullo al tener de plegarnos a las indicaciones de aquel que ya nos advirtió tiempo antes de la necesidad de protegernos...
Aprendamos de una vez, sopesemos el coste inicial y el coste al que puede llegar en caso de una infección y no pensemos más..., a la larga no nos ahorramos nada de nada y podemos duplicar el coste inicial de una buena protección.
¡BUENA CAZA!